Con la sonrisa en juego
Por Pachu Paniego
ANA SIRO
MINI BIO
Creadora de Volá, juguetes que incentivan la motricidad y el juego libre de todos los niños.
FELICIDAD. Charlamos sobre la felicidad con Ana Siro, la ganadora del Premio INICIA 2013, quien nos contó cómo su emprendimiento le regala sonrisas día a día, tanto a ella como a los chicos con discapacidad que reciben los juguetes que diseña.
En la mayoría de los casos, el resultado de un juego es que haya un ganador y un perdedor. Y hasta a veces, el imponerse sobre el otro puede convertirse en la esencia del juego. Pero no es ese el caso de Ana Siro, la creadora de Volá: un emprendimiento en el cual, sea cual sea la jugada, todos resultan ganadores. El proyecto consta del diseño y fabricación de juguetes que incentivan la motricidad de todos los niños y la rehabilitación de aquellos que tienen alguna discapacidad.
A la hora de crear su emprendimiento, Ana Siro no se basó en ninguna experiencia personal ni cercana en relación con la discapacidad. Fue simplemente un viaje de diez días a Córdoba lo que abrió su cabeza. “Yo sentía que el hacer algo propio era para genios o millonarios”, recuerda Ana, quien al volver de aquel viaje se compró un cuadernito y anotó: “niñosdiscapacidad- juego”. Fue así como empezó a investigar sobre la temática y se dio cuenta de que había mucho por hacer y de que su proyecto valía la pena.
El círculo virtuoso
Parte de la felicidad de Ana Siro está en involucrarse socialmente y generar cambios a través de su vocación. Partiendo de que su profesión busca diseñar productos que cubran una necesidad, siempre había pensado que esa necesidad debía tener un sentido, crear valor para la sociedad.
Comenzar a construir Volá junto a su hermano como socio despertó en Ana la sonrisa de quien se siente reconfortado por su trabajo. Pudo incorporar su inquietud social a un proyecto rentable cerrando así un círculo virtuoso.
Sonrisas que contagian
Hay pequeñas alegrías extraordinarias que forman parte de la felicidad que encuentra Ana en el día a día de su emprendimiento. Una de ellas es poder ver la reacción de los chicos que prueban los juguetes en el showroom
Aprender para sonreír
Ana Siro se define como una ferviente defensora de las capacitaciones. Asegura que “para seguir sonriendo, el emprendimiento debe ser sustentable en el tiempo”. En una promoción del día del amigo, una amiga suya que bien conocía esta voluntad por aprender, invitó a Ana a participar de un curso de riesgo en INICIA. Lo que Ana no sabía por ese entonces, era que casi un año después sería la ganadora del Premio INICIA 2013.
El premio fue un viaje de negocios a Europa en el cual, a diferencia de otras experiencias que ya había tenido en otros concursos, era ella misma quien tenía que armar sus objetivos y destinos del viaje.
El viaje no solo fue una experiencia “alucinante”, sino que además descubrió una gran motivación para hacer que su proyecto diera un paso más, y cuando volvió a la Argentina le dijo a su hermano-socio: “Vamos a poner la primera juguetería en Argentina para chicos con discapacidad”.
Fue así como nació Juguetes Universales, el nuevo emprendimiento a través del cual el medio millón de chicos con discapacidad que hay alrededor de toda la Argentina pueden comprar juguetes de forma online para desarrollar su motricidad y rehabilitación.
Con este nuevo paso hoy Ana Siro reafirma su sonrisa y la contagia a los chicos y familiares de quienes reciben los juegos. Hoy la felicidad se esparce, porque en este juego que ella propone, nadie pierde.
